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Mantener una buena hidratación para que el organismo funcione correctamente es importante para la salud, dado que el agua es el principal componente de nuestro cuerpo.

En verano, esta necesidad cobra mayor importancia si cabe, debido a las altas temperaturas que pueden provocar deshidratción. De hecho, el cuerpo regula con el sudor el aumento de la temperatura corporal, por lo que es importante reponer lo líquidos que se pierdan por esta vía.

Si normalmente se recomienda beber unos 1.5-2 litros de agua al día, en verano esta cantidad puede aumentar hasta los 3 litros, sobretodo si se realiza ejercicio. Esta necesidad de líquido se puede suplir con agua principalmente, así como comiendo frutas de temporada como son la sandía y el melón, que contienen una gran cantidad de agua y sales minerales.

En Mutua realizamos el siguiente video, llamado "Somos agua", en el que se recogen estos consejos y algunos más.

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