×
En Mutua Intercomarcal utilizamos cookies propias para el acceso al área privada y de terceros para realizar análisis de uso y de medición de nuestra web y mejorar nuestros servicios.
Pulsa el botón ACEPTAR TODAS para confirmar que has leído y aceptado todas las cookies, o pulsa CONFIGURAR si quieres modificar o rechazar su uso.

    

ES / CA
canviar a
català

Recursos

Blogs

¿Qué entendemos por un buen puesto de trabajo?

Los jóvenes profesionales han impuesto nuevas tendencias que se han ido consolidando en el actual mercado de trabajo. A pesar de que el salario sigue siendo un factor de peso a la hora de escoger un puesto de trabajo, cada vez más el ambiente laboral y las posibilidades de nuevos retos se imponen entre los trabajadores más jóvenes.

En un mundo globalizado donde las empresas compiten entre sí a nivel internacional para captar talento, crear espacios de trabajo que consigan atraer y conservar al talento, es algo que preocupa cada vez más a las empresas, y es que sus beneficios no son pocos. Estas oficinas de última generación consiguen aumentar la productividad de los empleados y crear un mejor clima de trabajo.

Pero, ¿cuáles son las características de los nuevos espacios de trabajo?

En primer lugar, se trata de espacios concebidos para promover el trabajo colaborativo, nueva tendencia laboral. Estos espacios abiertos permiten a los empleados comunicarse con el resto del equipo, la cual cosa fomenta la socialización. También permite descansar cuando más se necesite, y estimula la creatividad.

Pero no es tarea fácil crear zonas comunes. Para conseguirlo, se debe tener en cuenta dos términos que puede ayudar a crear espacios con armonía: El descanso activo. Se trata de facilitar al trabajador ambientes confortables que ayuden a que la creatividad y las ideas innovadoras surjan con mayor facilidad. El segundo término es la nueva tendencia del softseating. Esto significa abandonar el clásico modelo de oficina. Se trata de hacer que el trabajador se sienta tranquilo y confortable en un puesto de trabajo más amigable que le recuerde al hogar. Sofás, taburetes u otros muebles que típicamente no estaban en el puesto de trabajo serán los grandes protagonistas.

La ergonomía es otro pilar clave para mantener la salud y la comodidad en el puesto de trabajo. Diseñar espacios ergonómicos donde el trabajador pueda cambiar de posturas, así como habilitar diferentes espacios para que pueda realizar distintas actividades, harán que se mantenga activo y evite lesiones musculares que causen baja actividad.

Las zonas de servicio deben posibilitar que los trabajadores que quieran demostrar su talento, hagan vida en la oficina. Es tan sencillo como habilitar un espacio diáfano que cubra estas necesidades. Unas mesas altas para charlas con los compañeros; sillas con mesas compartidas y el equipamiento de cocina necesario para poder comer sin salir del trabajo o zonas pensadas para el descanso.

Por último, el cuarto pilar hace referencia a la flexibilidad laboral y horaria. Cobrar una nómina a final de mes por cumplir con un horario es algo que cada vez está siendo más cuestionado, dejando paso a la flexibilidad laboral.

Todo esto se puede resumir en una premisa: la productividad del trabajador está íntimamente vinculada al bienestar del trabajador en su puesto de trabajo. Por ello, es tan importante que las empresas se adapten a este nuevo ecosistema laboral si quieren atraer y retener al nuevo talento que se está incorporando.