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Endometriosis, la enfermedad silenciosa

La endometriosis es una de aquellas enfermedades desconocidas que afecta a mujeres, tanto adolescentes como adultas. En todo el mundo hay más de 150 millones de mujeres afectadas por esta enfermedad que es crónica y no tiene cura.


Aunque es una de las enfermedades ginecológicas más comunes, a su vez, es una de las más desconocidas y de difícil diagnóstico, ya que sus síntomas son muy variados y se pueden confundir con otras patologías. El diagnóstico puede retrasarse de 7 a 8 años, por lo que muchas veces nos referimos a ella como “la enfermedad silenciosa”.


Entre los síntomas más comunes de la endometriosis destacamos: 


  • Menstruaciones dolorosas, ocasionando la presencia de prostaglandinas, responsables de las contracciones uterinas.
  • Relaciones sexuales dolorosas.
  • Dolor en el intestino o parte baja del abdomen, por la presencia de adherencias, muy evidentes en ocasiones en las evacuaciones intestinales.
  • Periodos menstruales abundantes o con pequeños sangrados entre los ciclos.
  • Problemas reproductivos.

  • Muchas mujeres que sufren de endometriosis confunden esta enfermedad con los dolores habituales de la menstruación. Es en este periodo cuando el dolor se intensifica y, pese a que existen tratamientos, en ocasiones no pueden aliviar el punzante dolor.


    El tratamiento dependerá de los síntomas que presente la paciente, del estado de la enfermedad, de su edad, de sus antecedentes médicos y de otros detalles específicos que el ginecólogo tendrá que evaluar mediante exámenes médicos. Sin embargo, estos son algunos de los más comunes:.


  • Vida saludable: comer sano y practicar deporte ayudan a que tu cuerpo esté en las mejores condiciones para afrontar cualquier patología.
  • Antiinflamatorios: no es un tratamiento definitivo, pero algunas mujeres les ha funcionado muy bien para mantener una vida “normal” durante su periodo.
  • Pastillas anticonceptivas: suele ser el tratamiento más habitual. Son un tratamiento muy eficaz ante cualquier dolor provocado por la regla, pero es importante encontrar las pastillas que lleven la combinación hormonal idónea para cada una.
  • DIU hormonal: es un dispositivo que se coloca dentro del útero y tiene como función principal la anticoncepción. Tiene una duración de 3 a 5 años, se puede retirar en el momento que se desee (siempre por un ginecólogo en consulta) y su tasa de satisfacción es del 80% aproximadamente.
  • Laparoscopia: se trata de una intervención quirúrgica poco invasiva. Será un médico el que decida si esta intervención es la mejor en tu caso.

  • En España, la endometriosis afecta a más personas que la hepatitis C y el VIH. No solo se esconde tras los dolores de regla, sino tras el tabú que existe incluso en el momento de hablar abiertamente acerca de temas relacionados con el ciclo menstrual.


    Desde Mutua Intercomarcal ofrecemos varios consejos para prevenir y/o controlar la aparición de endometriosis:


  • Evita las dietas alimentarias muy restrictivas: es esencial seguir con una alimentación sana y equilibrada. Aumenta la cantidad de frutas y verduras que consumes diariamente y no abuses de lácteos y carnes.
  • Reduce la cafeína: la cafeína puede influir negativamente sobre los síntomas de la endometriosis.
  • Practica deporte con regularidad: establece una rutina para hacer ejercicio, ya sea al aire libre, en el gimnasio o en tu casa.
  • Evita el estrés: apuesta por seguir hábitos saludables, un ritmo de vida inadecuado y prolongado en el tiempo puede causarte un desequilibrio hormonal.
  • Descansa: dormir 8-9 horas y la calidad del sueño es un factor importante.
  • Acude al ginecólogo ante cualquier cambio menstrual: si notas algún cambio o dolor intenso, consulta lo antes posible con un profesional médico.
  • Busca el apoyo de tu pareja y amigos: el apoyo de tus seres queridos y su comprensión hacia la enfermedad te ayudarán a sentirte mejor y más segura a la hora de tomar cualquier decisión.

  • Si presentas alguno de los síntomas analizados puedes padecer endometriosis. Pide cita con tu ginecólogo de confianza y resuelve tus dudas, recuerda que es recomendable realizar una revisión ginecológica de forma anual. ¡Mímate y cuídate!